Se ha popularizado la historia de una señora española y como lidió con su depresión por medio de Pokemon Go
Todos conocemos Pokemon Go, tuvo un inicio muy fuerte en nuestra ciudad. Por un periodo de varias semanas, era común encontrarse con jugadores de este título en cualquier parte de la ciudad. Pasaron las semanas y los menos interesados comenzaron a alejarse del título, dejando espacio a un público más reducido. Sin embargo, eso no significa que Go haya dejado de ser popular, todo lo contrario. No es extraño encontrarse a alguien caminando o en el micro jugando esta entrega de Pokemon. Aunque sea menos popular, este sigue contando con millones de jugadores.
Es por eso que una historia como la de Sofía pudo suceder.
Sofía es una enfermera de 67 años que vive en Badalona (España). Ella perdió a su esposo, víctima de cáncer, hace una década. Esto desencadenó en ella una fuerte depresión. Uno de sus nietos, Diego (7 años), le introdujo a ella el juego de Pokemon Go. Juntos, exploraron las calles de Badalona y esto fue reinventando la forma en la que Sofía veía al mundo. Eventualmente, ella también decidió abrir su cuenta de Go, y comenzó a jugar por su cuenta. Caminar por la calle o comprar en un mercado comenzó a sentirse diferente, ya que se convirtieron en aventuras para buscar más pokemones.
Esta historia no es una excepción, ya que los trabajadores sociales de la ciudad de Badalona se han dado cuenta del potencial que esconde Pokemon Go. Lo explican de la siguiente manera, este título es uno que apoya dos dimensiones del buen envejecimiento: ejercicio e inclusión social. Como el juego requiere de cooperación, esto ha causado que (solo en Badalona) se organicen más de 6000 batallas entre jugadores y casi 29,000 interacciones entre individuos.