Por CharlieChimp
Publicado: 26 de abril del 2018
10 años. Han sido 10 años desde que el Universo Cinematográfico de Marvel dio inicio con Iron Man, allá por el 2008, fue el boom de las películas de superhéroes y año tras año veníamos película tras película. Pero ninguna era en vano, todas tenían un motivo, todas eran una pieza importante en este universo, todas nos dirigían hasta aquí, todas nos preparaban para enfrentar a Thanos. Ha sido una montaña rusa el camino hasta aquí con altos y bajos, con algunas películas mejores que otras y a la vez distintas entre sí, desde la oscura Thor: The Dark World hasta la divertida y musical Guardians of the Galaxy. Entonces, ¿Cómo creas una película como Avengers: Infinity War? ¿Cómo haces para unir a todas estas películas en una sola? ¿Cómo haces para que todas fluyan y encajen a la perfección? Y más aún ¿Cómo haces para manejar a tantos personajes (y las personalidades de los actores) para que todos tengan un rol importante en la historia? La respuesta la tiene Thanos.
Thanos lo dice claramente cuándo se le pregunta cuál es el motivo de su objetivo, el de aniquilar la mitad del universo: la clave es el balance. Lo dice varias veces, como si fuese su motto, lo que él quiere es el equilibrio del universo, así como los hermanos Russo quieren el equilibrio en su película. Desde un inicio, con tan solo la idea de unir a todos los superhéroes de Marvel en esta película prometía mucho pero a la vez arriesgaba por igual, a buena hora son dos hermanos y no uno solo los que dirigen esta película ya que no solo son las variopintas historias que hay que encajar sino también a los actores como tal, que estos hagan química en la pantalla. Aquí los hermanos Russo hacen un excelente trabajo haciendo que 10 años de películas encajen prácticamente a la perfección en Avengers: Infinity War, cuidando los detalles de las consecuencias de películas anteriores y siguiendo la continuidad de las películas recientes de cada personaje, por ejemplo Thor sigue deambulando con los sobreviviente de Asgard, Tony trata de resolver su vida con Pepper, el Capitán sigue escondido de la red luego de los eventos de Civil War, mientras que Bruce Banner se ha perdido de la mayoría eventos desde su exilio. Además, cuentan una historia que salta de frente a la acción y no pierde tiempo en tanto preámbulo, presentándonos rápidamente a los personajes con algo que los caracteriza, por ejemplo, Quill y compañía entra con música, y agrupándolos para desarrollar su historia juntos -solo imagínate a Stark y Strange en la misma escena o a Thor con Drax- para que luego se unan todos ya cerca al momento cumbre.
Pero ¿Cómo lograron esto? Pues gracias a la fórmula «Guardianes de la Galaxia». Esta película, para bien o para mal, rompió con el paradigma de las películas de Marvel apostando más por la cultura popular, por la música y estilo de los ochenta, y por tener situaciones y diálogos tontos (en el buen sentido de la palabra, «silly») fuera de contexto que daban risa y servían para resolver una situación tensa. Un buen ejemplo es Thor: Ragnarok que apostó por este estilo a pesar de ser el «Ragnarok» algo oscuro y terrible en sí, pero funcionó y termino siendo irónicamente la mejor película de Thor. Así Avengers: Infinity War incluye en su estructura algunos de estos elementos, especialmente esos diálogos tontos y frenéticos que no solo sirven para hacer progresar la historia, sino que también traen un humor fresco al ya algo trillado humor Stark, además que crean situaciones propias de personalidades tan dispares que se enfrentan a un destino tan caótico, pero no tan caótico como sus relaciones.
Con esto Avengers: Infinity War tiene un balance óptimo entre escenas de acción, momentos graciosos y otros momentos épicos, ya que cada escena empieza con un problema, completa una acción pero te deja con un enganche que continúa después. Además, los Russo también querían un balance entre lo esperado, osea entregar lo prometido, y dar una que otra sorpresa, lo cual si se considera lo mucho por contar, es arriesgado pero más que bienvenido y bien logrado.
También existía el problema de cómo a darle a cada personaje un tiempo de pantalla decente y no solo eso, sino también un motivo u acción que aportara a la historia. Aquí también los Russo supieron crear un historia que no relega al relleno a ningún personaje, sino incorpora hasta al personaje más pequeño, aunque sea en una pequeña acción en la cual se evidencia la personalidad y carácter del personaje. Sí, hay de todos un poco, inclusive del apático adolescente Groot . Sin embargo es imposible no darle más prioridad a algunos más que otros y me refiero a ellos que han llevado la batuta a lo largo de estos 10 años y se han hecho más películas de ellos. Me refiero al Capitán América, Tony Stark y Thor, y no por algo ellos encabezan las escenas en las que aparecen. Por ejemplo, Thor lidera sus escenas y se embarca en un misión propia que luego será crucial en la historia.
Sin embargo, aquí el problema que enfrenta Avengers: Infinity War es hasta inevitable, tantos personajes, tantas acciones, tantos escenarios pueden hacer que la historia se pierda en el espacio y el tiempo y confunda al espectador sobre todo si este no está al tanto con las acciones y consecuencias previas a esta película. Son algunos detalles en el manejo del tiempo que hacen que Thanos siempre esté un paso adelante y que sea un villano imposible de detener y que cualquier acción que hagan nuestros héroes sirva de poco o nada. Otra consecuencia de esto, es que entre tanta escena de acción o momentos cómicos, llega un momento solemne o dramático pero que debido al corto tiempo, no se llega a generar la atmósfera necesaria para sentir el impacto de la historia de un destino tan trágico e inevitable.
Para esto hay que tener en cuenta que Avengers: Infinity War sirve como preámbulo a la verdadera acción, sirve como una suerte de embudo que hace converger todas las historias separadas bajo el paraguas de los Avengers. Para narrar la historia de manera efectiva y sin atiborrar de personajes una misma escena, los hermanos Russo dividen a los personajes en pequeños grupos que si bien están separados comparten un mismo objetivo: Thanos. Por lo que sus acciones y consecuencias son más fáciles de narrar y todas aportan a la historia de alguna u otra manera.
Por otro lado, la decisión de hacer Avengers: Infinity War parte 1 y parte 2, es una excelente idea, que a mi parecer no solo sirve para poder narrar una historia más larga, considerando que tiene una duración de 2 horas 40 minutos, sino que sirve también para no enredar la historia. Para empezar, como ya mencioné más arriba esta primera parte cuenta la historia de como todo lo sucedido nos dirige a un terrible e inevitable desenlace, el tono de la película es más de desesperación y desasosiego frente aun enemigo tan fuerte y aparentemente invencible. Por lo que combinarlo con un tono más triunfante y épico que sería la victoria de los Avengers sería mucho y hasta insostenible para una solo película. Dividir la historia en dos y que esta primera parte haga el trabajo sucio y deje el camino despejado para la épica que será la segunda parte es de las mejores decisiones que han tomado los hermanos Russo.
Tal como se dijo, Avengers: Infinity War es una película narrada desde el punto de vista de Thanos. Es el que tiene más tiempo en pantalla y trasmite la sensación de que es un buen villano, con un objetivo claro y una voluntad inquebrantable para lograrlo. Características que lo hacen digno del guantelete y de manejar el poder de las piedras del infinito. Realmente da la sensación de que nadie está a salvo hasta el último minuto, que no hay forma que los Vengadores ganen. Aquí Josh Brolin hace un excelente desempeño como villano, creando un personaje despiadado con un pasado que lo forjó tal como es. Como no hubo una película de Thanos y solo se le ha visto en escenas post-crédito o alguna aparición corta en una película, se aprovechó esta película para contar más su historia, de su pasado y el motivo de su objetivo. Pero esto no se logra del todo.
A menos que tengas afinidad por la frase de Maquiavelo «El fin justifica los medios» no se genera empatía con Thanos. El villano explica sus motivos pero no se muestra de donde se origina, no dice más que repetirlo, por lo que no te lo llegas a creer. Creo que se perdió la oportunidad de mostrar un poco más de su pasado que lo forjó tal como es o su relación con sus hijas, las cuales tienen un papel importante, y no solo mostrarlo como el destructor de mundos plano y sin trasfondo que solo hace lo que hace por maldad. Tiene más, se ve su historia pero solo se rasguña la superficie.
Por otro lado, el problema es que el tiempo apremia y esas escenas solemnes y dramáticas no se logran consolidar y transmitir lo que quieren ya que no hay el tiempo para crear una atmósfera precia que resalte ese momento. Si hay contraste con las escenas divertidas, pero no lo resaltan.
Avengers: Infinity War es todo lo que se prometió y más, ya que tiene una que otra sorpresa por ahí. Es una buena película que logra un balance entre escenas cómicas, de acción y momentos épicos, y que marca el inicio del fin de 10 años de películas de manera estupenda, hilando todas las historias y encajando todos los hechos de manera magistral, además de dejar un buen enganche para la segunda parte. Pero tan solo el hecho de que le hayan dado un espacio y un rol a cada personaje ya es un gran logro. Tiene algunas fallas propias de hacer una película con un gran elenco y tener mucho por contar, como que la historia se pierda por momentos entre tanta acción o la poca empatía con Thanos, que de por sí ya es villano digno del final del Universo Cinematográfico de Marvel. Han sido 10 años y todo nos ha llevado a este momento, todo nos lleva a Thanos. Damas y Caballeros, disfrútenla, esperen lo inesperado y prepárense para la segunda parte.
Lo positivo:
Lo negativo: