Call of Duty Black Ops 6 | Análisis

Call of Duty Black Ops 6 lleva varias semanas en el mercado, convirtiéndose en uno de los mejores estrenos de octubre, según cifras de Circana, empresa especializada en el comportamiento de consumidores. Este año ha sido muy importante para Activision en relación a su franquicia más aclamada, principalmente porque el año pasado no la pasaron muy bien en cuanto a críticas con Modern Warfare 3, y el retorno de la serie Black Ops atrajo miradas.

Afortunadamente, Treyarch se ha tomado cuatro años en entregarnos uno de los títulos más sólidos de la nueva era de Call of Duty, aunque no era muy difícil, tomando en cuenta que el estudio hizo sus deberes con Cold War.

Aun así, es gratificante encontrarnos con un producto tan sólido como Black Ops 6, que, aunque no sea completamente perfecto, sí tiene los méritos para que se mantenga vigente en los próximos meses, hasta esperar al siguiente Call of Duty en 2025.

El paquete de Call of Duty Black Ops 6 nos ofrece lo que ya conocemos de la serie: Una campaña, multijugador, zombies, y el renovado Warzone. De la campaña, podemos decir unos cuantos detalles interesantes, como mantenerse aún en la línea del canon de las anteriores entregas de Black Ops, pero contando una historia original que te permita disfrutar, sin conocer los antecedentes.

La campaña de Black Ops 6 nos sitúa años después de los sucesos de Cold War, en plena década de los noventa. Manejamos a un nuevo grupo de operadores, quienes terminan involucrándose en una red de conspiración dentro de la CIA, que llevará a no confiar en nadie, e incluso persiguiendo a un viejo conocido: Russell Adler.

El esquema narrativo es bastante parecido al de Cold War, excepto que ya no podemos ‘crear’ un personaje original como ocurrió en Cold War donde podías elegir su género y características; un detalle que, sinceramente, no aportaba en absoluto.

Lo que sí se ha mantenido son las interacciones con los demás personajes. Las misiones se llevan a cabo dentro de un refugio, donde estarán los otros miembros de tu equipo, incluyendo viejos conocidos como Frank Woods, postrado en una silla de ruedas.

Este refugio también sirve para mejorar armas o equipo para las misiones, aunque, siéndote sincero, lo utilice poquísimo, ya que no había mucho desafío en los capítulos del modo historia. Más allá de eso, las misiones siguen el patrón de darnos algunos momentos de acción, otras de sigilo, y una de las peores misiones en Medio Oriente donde apostaron por incluir un mundo abierto, similar a lo que se hizo en Modern Warfare 3, consiguiendo el mismo resultado: aburrido a más no poder. Felizmente se puede completar ignorando las ‘misiones secundarias’ que únicamente consisten en ir a bases enemigas, donde se refleja horriblemente las deficiencias de la inteligencia artificial de los enemigos.

Y aunque pareciera que salí ligeramente disgustado, en realidad la campaña tenía sus momentos donde hasta se notaba la inspiración en películas de atracos, como cuando visitas un casino de lujo, y empiezas a ver desde la perspectiva de todo tu equipo. Las cinemáticas están como siempre, de primer nivel, con un nivel de detalle que  no deja de sorprenderte el empeño que le ponen a involucrarse más en la trama de espionaje. La duración de la campaña es un poco más extensa de lo que fue Modern Warfare 3, dejándonos, como ya se hizo costumbre, en suspenso de qué es lo que seguirá más adelante, aunque todos sabemos que están dejando todo listo para desarrollar el contenido post-campaña en Warzone.

Black Ops 6 tiene el multijugador más divertido en años

Dejamos un lado la campaña para abordar el modo favorito de todos: el multijugador. Treyarch se ha lucido completamente este año con su propuesta, porque trae cambios simpáticos como mejorar el movimiento del personaje, agregándole mayor dinamismo al momento de estar en el campo de batalla.

Quizás no sea lo más utilizado porque uno se acostumbra al movimiento clásico, pero llega a ser efectivo cuando te encuentras en una situación donde las balas no paran. Es una muestra que el estudio siempre tiene la intención de innovar en sus entregas, sacándole el jugo a lo necesario.

Muy aparte del movimiento, la personalización de las armas sigue manteniéndose igual que las anteriores entregas, ofreciéndonos distintas alternativas para potenciar nuestro rifle de asalto, subfusil, escopetas, etc. Y sí, las escopetas continúan siendo peligrosas en las manos correctas.

Además de ello, tenemos los famosos “perks” que otorgan ciertos beneficios como disminuir el daño de granadas, no aparecer en los rastreadores enemigos, movilizarte mejor cuando corres y al mismo tiempo apuntas; y también el retorno de los ‘Wildcards’ que impacta en tu estilo de juego dándole versatilidad.

Pasando a los mapas de Black Ops 6, aquí si tengo unas cositas que decir. En principio, tenemos la ‘vieja confiable’ como Nuketown, donde la diversión está garantizada. Por otro lado, están algunos mapas que se sienten un tanto aburridos. Si bien varios manejan el esquema de no hacerlos tan extensos como Modern Warfare, es el diseño insípido de algunos escenarios que termina restándole puntos. La cantidad de mapas, 16 en su lanzamiento, me parece justo, pero sí se nota que a algunos escenarios le pusieron más cariño en cuestión de detalles.

Agradezco eso sí que trajeran de regreso el poder votar por cuál mapa jugar. Así los jugadores podemos decidir antes de entrar a la partida dónde conviene repartir balas, y nos evitamos los mapas irregulares. En cuanto a operadores, aunque no cambian tu manera de jugar, sí da gusto que esté balanceado entre los viejos conocidos, y nuevos personajes. Woods, aunque en la campaña esté en silla de ruedas, sigue teniendo protagonismo.

El modo zombies está… ¿ok?

Cuando llegó por primera vez el modo zombies a Call of Duty con World at War, era de aquellos que se las pasaba horas disfrutando cada ronda. Me ocurriría lo mismo con las siguientes entregas dentro de la serie Black Ops, pero a poco el interés fue disminuyendo, principalmente porque se hacía un poco más ‘denso’ en cuestiones de querer expandir a otros rumbos la experiencia.

Conscientes de que había un público interesado en la clásica modalidad de rondas, Black Ops 6 presentó Liberty Falls, un mapa que nos sitúa dentro de esta nueva historia de los muertos vivientes, en un campo semi-abierto, donde iremos enfrentándonos a los enemigos en cada ronda.

A ver, nadie niega que llega a ser divertido, pero en mi caso, yo ya le perdí el encanto a seguir repitiendo lo mismo en las rondas, peor aun cuando encuentras gente que sencillamente no quiere avanzar en los easter eggs, y se dedican a ir disparando todo el tiempo.

Por lo demás, encontré las características que hacen interesante al modo zombies como los potenciadores, o ir abriendo zonas para que aparezcan más enemigos en pantalla.

¿Black Ops 6 es lo que necesitábamos este año?

Me queda claro que la apuesta de Treyarch ha sido gigantesca este 2024. Call of Duty se sentía muy apagado los últimos años, con Infinity Ward intentando a medias salvar la serie Modern Warfare; lo mismo ocurrió con Sledgehammer que están en deuda de darnos un título a la altura.

Treyarch se maneja por su cuenta, y lo hace muy bien. El multijugador seguro irá mejorando con el pasar de las temporadas, agregándole armas, operadores, y demás, y en el estado que está en estos momentos, sí dará buenas horas de diversión.