Publicado: 19 de abril del 2017
Dark Souls III: The Ringed City es el segundo y último paquete DLC para el tercer juego de la obra de From Software y Bandai Namco, pero es también la última entrega de cualquier tipo de contenido para la saga Dark Souls. Esto obviamente pone un gran peso y responsabilidad sobre los imaginarios hombros de The Ringed City; pues luego del hermoso, ambientalmente hablando, pero corto y ligeramente decepcionante primer DLC: Ashes of Ariandel; la despedida de los fans para una de las series favoritas de videojuegos de los últimos tiempos corría el riesgo de ser solo algo regular y hasta pasar desapercibida.
Junto con el lanzamiento de The Ringed City, Bandai Namco anunció la salida de una versión definitiva de Dark Souls III incluyendo todo el DLC y titulada The Fire Fades Edition.
Y es que puede ser difícil imaginarlo a estas alturas, pero Dark Souls III lleva con nosotros ya más de un año. Lanzado el 12 de abril del 2016, el juego nos pone en control de un nuevo guerrero no muerto, esta vez encargado de buscar a los antiguos Amos de la Ceniza en una aventura final en este trágico universo. En ese momento, el anuncio del cierre de la trilogía incluyó la mención de un pase de temporada dividido en dos partes. La primera, el mencionado Ashes of Ariandel y la segunda, el tema del presente análisis: The Ringed City.
Disponible desde el pasado 28 de marzo, The Ringed City no es un paquete perfecto ni mucho menos una secuela al nivel del juego base; pero puede presentarse orgullosamente ante los fans como una combinación de los últimos grandes momentos de la serie. Con originales armas mágicas, escenarios nostálgicos y los jefes más difíciles de Dark Souls III, The Ringed City trae consigo un satisfactorio cierre a la misteriosa aventura que a tantos ha enganchado desde el primer juego.
Dark Souls III: The Ringed City deja de lado la ya conocida historia del apagarse de la flama y el final de la era de fuego para recordarnos un hilo de historia un poco olvidado luego del primer título: El Dark Soul. El objeto titular del juego y de toda la serie, obtenida en su momento por el Pigmeo Furtivo durante el surgimiento de los amos de la ceniza y la caída de los dragones. La nueva misión de nuestro protagonista será encontrar el Dark Soul o lo que queda de ella, teniendo que descender hasta la olvidada «Ringed City» lugar donde los pigmeos la llevaron.
Existen dos maneras de iniciar tu aventura en The Ringed City, dependiendo de si has adquirido o no previamente el DLC de Ashes of Ariandel.
El inicio de esta nueva aventura no requiere que hayamos jugado el DLC anterior; pero en caso lo hayamos comprado o tengamos el pase de temporada, ambas historias pueden unirse. Es así como, luego de la derrota de la hermana Friede, nos vemos transportados a una nueva área: Dreg Heap, un lugar formado por pedazos de mundos distintos. Podemos ver claramente el caos de estos escenarios, plagado de altos descensos, estructuras como casas y torres rotas o incompletas, árboles cuyas raíces crecen sin control y enemigos completamente corruptos y mal-formados.
A diferencia de Ashes of Ariandel que nos presentaba un gran par de áreas abiertas a investigar; el Dreg Heap es el inicio de una aventura más lineal en The Ringed City. Luego de superar los primeros obstáculos y al poderoso jefe inicial, empezaremos nuestro verdadero descenso por la ciudad anillada, que está llena de recuerdos y referencias para los más antiguos fans de la serie.
El inicio en Dreg Heap no te dará respiro alguno y será necesario que te saques de encima cualquier oxido que tengan tus habilidades jugando Dark Souls.
Como es típico de Dark Souls, este nuevo DLC no da gran exposición a la trama del juego y dependerá del jugador descubrir sus secretos a través de la observación y lectura de las muchas descripciones de items y objetos encontrados. Sin embargo, gracias al buen diseño de niveles, beneficiados por el menor tamaño de los ambientes, podemos ver escenarios mejor estructurados y retos mucho mayores que los del DLC anterior. Eso sí, el juego no te dará respiro alguno y será necesario que te saques de encima cualquier oxido que tengan tus habilidades.
El reto mayor no solo aporta a la calidad de la experiencia, sino también al tiempo invertido. Si bien pude acabar Ashes of Ariandel en un par de sesiones de juego de casi 2 horas cada una; The Ringed City me tomó casi 8 horas investigar por completo y estoy incluyendo en esa afirmación grandes detalles como una nueva covenant basada en pvp y uno de los jefes opcionales más difíciles de Dark Souls.
The Ringed City no sería parte de la serie Dark Souls si tan solo se tratara de un paseo por zonas tenebrosas. Tanto el Dreg Heap como las siguientes áreas están llenas de peligros y enemigos totalmente nuevos para el juego. Empezando por unos monstruos voladores casi inmortales y muy molestos que se dedicarán a lanzarte rayos desde el cielo hasta que encuentres su punto débil explorando el lugar. Estoy seguro que estos «ángeles» serán el martirio de muchos al inicio del DLC.
The Ringed City trae consigo 21 nuevas armas, todas ellas con habilidades especiales al blandirlas con las dos manos.
Aparte, si bien veremos enemigos antiguos por ahí, así como versiones corruptas de otros, más del 80% de los rivales en The Ringed City son diseños completamente nuevos. No solo tenemos a los mencionados ángeles, zombies que salen del suelo ilimitadamente, gigantescos caballeros corruptos, así como los poderosos guardianes de la ciudad anillada: Los Ringed Knights, nos esperan para hacernos la vida más difícil.
Estos enemigos además traen con ellos nuevas armas y hechizos, que en típico estilo Souls, podrás obtener y aprender a usar con los atributos correctos. The Ringed City trae consigo 21 nuevas armas, todas ellas con habilidades especiales al blandirlas con las dos manos. La armas de los Ringed Knights en particular traen todo un nuevo estilo de combate con escudos lanzallamas, espadas gemelas gigantes y lanzas capaces de consumir toda tu stamina si tratas de bloquearlas con un escudo medio o pequeño. El nuevo armamento seguro tendrá a varios pegados al DLC por un buen tiempo extra.
The Ringed City será todo un reto, incluso para veteranos de la serie y más aun si eres de los que se niega a buscar ayuda en línea con otros jugadores. Pero esto no solo se debe a los complejos enemigos presentes en las zonas avanzadas del juego, sino también (y en especial) a sus poderosos jefes.
A diferencia de Ashes of Ariandale que solo traia 2 jefes consigo, The Ringed City trae 3 nuevos jefes obligatorios y uno opcional que todo fan debe al menos tratar de enfrentar.
Luego de pasar por los peligros del Dreg Heap nos veremos cara a cara con el primero de estos poderosos enemigos. Sin entrar a muchos detalles y correr el riesgo de spoilear algo importante, puedo adelantarles que este primer jefe no es lo que parece. El combate incluye un par de sorpresas, una de las cuales involucra a otro jugador en caso juguemos en línea, esta sorpresa me tomó con la guardia baja y no pude hacer otra cosa más que reir al caer derrotado. Momentos como este siempre me han parecido el corazón de Dark Souls (Demons’ Souls y Bloodborne también) y afortunadamente The Ringed City trae varios de ellos.
El segundo gran enemigo del DLC incluso trae consigo una mecánica que parecía olvidada desde Demons’ Souls que dependerá mucho de si estás jugando en línea o no. En caso optes por la primera opción tu rival será un jugador humano, bastante mejorado gracias a la ayuda del juego y con la ayuda de un par de aliados controlados por la computadora. Este jefe será tan peligroso como cualquier enemigo en un entorno pvp; pero la diversión no acaba aquí, ya que uniéndote a la covenant correcta, podrás ser invocado por el juego para tu ser el jefe de nivel de otro jugador.
Ver esta mecánica de regreso no solo me trajo buenos recuerdos, sino también me dio una razón para quedarme en esa zona y enfrentar a ese jefe un buen número de veces.
Cada jefe en The Ringed City se siente muy especial, ya sea por motivos de trama, nostalgía, historia o por lo originales que son al momento de pelear. La sensación de logro y recompensa al derrotar a cada uno de ellos se mantiene tan fuerte y gratificante como en el resto de Dark Souls III y ninguno te va a dejar disfrutar el sabor de la victoria fácilmente.
Me cuesta un poco creer que Dark Souls realmente haya acabado y que Hidetaka Miyazaki y el equipo de From Software posiblemente no vuelvan a manejar la serie. Aunque uno nunca sabe lo que depare el futuro, me da gusto que The Ringed City sea la despedida a este grandioso tercer capítulo.
Un DLC muy superior al anterior y lleno de opciones y detalles tanto a nivel artístico como jugable, nuevas armas vistozas y divertidas de usar, enemigos regulares listos a derrotarte de un par de golpes si los subestimas y jefes muy memorables ya sea que los enfrentes solo o acompañado por otro jugadores.
Es cierto que siento que el cierre de una de mis series favoritas de la generación actual y pasada de consolas pudo ser un poco más notorio y cinemático, con un cierre más claro y conciso de la historia que nos llevan narrando por 3 juegos y varios DLC. Sin embargo, al mismo tiempo sé que esa no es la esencia de Dark Souls.
Dark Souls III: The Ringed City variará en duración según que tanto quieras sacarle el jugo, pero espera por lo menos unas 5 horas de juego en tu primer intento.
Esta es una saga que nunca ha dependido de grandes cinemáticas o extenso diálogo para exponer sus escenarios y su trama; siempre ha confiado en su jugabilidad y el interés propio del jugador de investigar cada uno de esos pequeños detalles regados por las varias horas de juego.
Si bien algunos misterios quedarán sin resolver, al menos hasta ser interpretados por la diligente comunidad de fans, The Ringed City deja en alto este énfasis en interacción sobre narración característico de la serie. Esto lo logra gracias al uso de escenarios caóticos pero muy bien diseñados, enemigos regulares y jefes originales y difíciles, así como suficiente misterio para dejarnos investigando un poco más este melancólico mundo sin esperanza.
Dark Souls III: The Ringed City es el resurgimiento final de la franquicia y quizás de su comunidad. Este DLC busca juntar a sus fans nuevamente para enfrentar un reto más y quizás dar un último adios. Es un momento importante y algo que dichos jugadores deben experimentar.
Dark Souls III: The Ringed City cierra hábilmente la serie, con grandes retos a vencer y momentos memorables por disfrutar.
Dark Souls III: The Ringed City ya está disponible desde el pasado 28 de marzo en las plataformas PC, PlayStation 4 y Xbox One.
El presente análisis de Dark Souls III: The Ringed City fue realizado con un código de descarga para PlayStation 4 brindado por Bandai Namco.
Lo positivo:
Lo negativo: