Publicado: 27 de septiembre del 2017
Siguiendo el camino que se empezó a trazar Konami desde la edición 2015, Pro Evolution Soccer 2018 ha llegado a las tiendas locales el 12 de septiembre. Después de haber logrado superar el doloroso proceso de la adopción del Fox Engine (le costó carísimo en PES 2014), la franquicia de Konami está lista para demostrar que quiere exprimir al máximo el potencial de este motor gráfico.
En la acostumbrada entrevista con Robbye Ron, community manager de PES para Latinoamérica, habíamos comprobado que este año el enfoque de la compañía es ir más hacia el camino del simulador, aquel que se encuentra en el extremo opuesto de lo que ha venido siendo PES en estos años: un arcade, y no sabemos si voluntaria o involuntariamente, pero asemejándose de esta manera a su eterno rival en el fútbol de videojuegos: FIFA.
Pero, si bien un apuesta de este calibre podría resultar atractiva para quienes están más acostumbrados a jugar FIFA y desean probar y acostumbrarse al PES, también tenía el riesgo de resultar algo decepcionante para sus fans quienes en el transcurso de estos años han estado acostumbrados a la rapidez y vertiginosidad del juego, prefiriendo seguir siendo un arcade que empezar a asemejarse a su competidor.
¿Podrá PES 2018 conseguir empezar a cautivar y capturar a los fans de FIFA sin perder a los propios en el intento? Si quieres saber más acompáñanos en este review de Pro Evolution Soccer 2018.
Es, para bien y para mal a la vez, el más grande cambio que se ha hecho en esta versión. Para bien porque cambia el paradigma y le brinda un nuevo desafío a quien viene jugando PES todos estos años: la velocidad se reduce un poco para priorizar mucho más la elaboración. En la demo yo me había preocupado porque este ritmo más pausado era mucho más notorio, lo cual probablemente incomodaría a quienes prefieren siempre al PES por encima de FIFA debido a su estilo de juego más arcade, pero felizmente esto se pudo regular en la versión final sin alterar el objetivo de Konami para con su franquicia: dar el primer paso para ser más un simulador. Esta característica es una evolución del Real Touch de PES 2017: Real Touch+.
La inteligencia artificial, más pulida que nunca, puede imponerte un reto interesante, sobre todo si has logrado desbloquear el modo imbatible (5 victorias en modo leyenda), de modo que cualquier apertura en tu defensa puedes pagarla muy cara. A su vez, el juego recompensa el juego inteligente y no sólo la combinación de habilidad, velocidad y movimientos que se te muestran en las estadísticas de los jugadores.
Gracias al Fox Engine, nuevamente tenemos a una IA adaptable: La CPU aprende de tu estilo de juego y se ajusta a él. Así que si eres de los que siempre ataca por las bandas, la CPU empezará a defenderse mejor en esos lados. O si eres de los que manda pases a un sólo jugador estrella de tu equipo, puedes estar seguro que le duplicarán la marca en el transcurso del juego, y ojo que lo mismo le pasa a la CPU cuando te ataca.
Si la preocupación de muchos era justamente este apartado, pueden respirar tranquilos. Sí hay mejoras notorias en la conectividad online.
Sabiendo de los problemas que se suscitaron el año pasado, Konami lanzó hace unos meses la beta online, que exclusivamente fue realizada para probar la fortaleza de la conexión para la presente entrega. Hubieron quejas, definitivamente, pero justamente el objetivo era que ese feedback pueda servir para pulir la versión final del juego y así no decepcionar a los fans.
La rapidez para encontrar una partida, sin embargo, sigue dependiendo de la velocidad de tu conexión, ya que como usuario puedes filtrar a aquellos usuarios que no tengan una velocidad de conexión potente y dejar sólo a los que la tengan, pero bueno, no es como que Konami tuviese que pagarte el recibo de internet, ¿verdad?
Por otro lado, MyClub, modalidad que ya se ha vuelto un clásico, regresa también en esta edición dándote las posibilidades de armar el equipo de tus sueños y recompensándote por cumplir determinados objetivos. Además, te permite contratar a jugadores legendarios como en el caso de Diego Armando Maradona, quien en esta ocasión ingresa a la franquicia de manera oficial.
Más allá de eso, y a diferencia del año pasado, PES 2018 sigue ofreciendo poca variedad de modalidades: Para jugar offline, más allá de partidos rápidos y torneos, tenemos la Liga Master y Ser una leyenda. En el primero, nos ponemos en la piel de un entrenador y debemos gestionar negociaciones de fichajes y contratos, así como definir las habilidades que trabajarán los jugadores en los entrenamientos. Podemos llegar a ser seleccionadores nacionales, y hay primas por ganar muchos partidos seguidos, así como roles de los jugadores que pueden repercutir en el conjunto. En el segundo de esos modos, manejamos a un único jugador, real o creado, y debemos llevarlo hasta lo más alto, ganándonos la confianza del entrenador y mejorando la forma física. Como de costumbre, no es posible pedir el balón a los compañeros, así que hay que buscar desmarcarse para llamar la atención.
Más allá de eso, PES 2018 no tiene mucho más que ofrecer. Las modalidades de juego son en esencia las mismas del año pasado, salvo por la inclusión de la modalidad 3 vs 3 online y el random match, que refuerzan el juego cooperativo en una misma sala, pero no añaden mucho a cuando quieras jugar por tu cuenta sólo en tu casa.
Al menos hasta la salida del juego de la competencia, podemos decir que PES 2018 es el mejor juego de fútbol en videojuegos. Una jugabilidad impresionante logra empezar a borrar el indigno pasado y busca cautivar a quienes no son fanáticos de la franquicia, además de ser un portento visual. Sin embargo, la apuesta por nuevos modos de juego para un sólo jugador ha sido muy conservadora este año.
Lo positivo:
Lo negativo: