Los días de Bobby Kotick al mando de Activision Blizzard están llegando a su fin. Tras haberse concretado la adquisición del estudio por parte de Microsoft, el CEO pasará a retirarse completamente a finales del año pasado. Sin embargo, no se irá con las manos vacías, ya que al tratarse de uno de los inversionistas más fuertes, recibirá una fuerte suma de dinero del trato, así como una indemnización si su contrato termina de manera imprevista en medio de un cambio de control de la compañía.
Las buenas noticias es que Kotick podría alejarse completamente de los videojuegos. De acuerdo al periodista Sean Whetstone, conocido podcast de West Ham, el empresario habría puesto su mirada en invertir en el West Ham United, un reconocido equipo de fútbol profesional que participa en la Premier League.
Según una fuente de Whetstone, le habrían ofrecido a Bobby Kotick convertirse en el inversionista del 10% dentro del club de fútbol. Tal y como menciona VGC, los norteamericanos han hecho negocios importantes con organizaciones deportivas de la Premier League. Así, tenemos que clubes como Arsenal, Manchester United, Aston Villa y Liverpool cuentan con inversionistas de Estados Unidos.
Kotick se retirará de Activision Blizzard, donde estuvo desde 1991 cuando únicamente era Activision. A pesar de haber sido una figura muy representativa en la compañía, siendo alguien clave para manejar las diferentes franquicias que tenían en su poder; el ejecutivo se ha enfrentado en los últimos años a severos cuestionamientos por la forma en cómo manejó las denuncias de acoso laboral y sexual que vivieron varios empleados, en especial mujeres, lo que llevó a una crisis interna con la fuga de varios personajes siniestros, así como las denuncias anónimas de exempleados y trabajadores que aún se mantienen en distintos equipos.