Creo que todos piensan que es muy fácil estar al frente de un monitor o una webcam. Yo, en particular, considero que no lo es. Para hacerlo hay que ganarle a tus miedos y ellos a veces te hacen una mala pasada. Pero más allá de eso, está el “que tan bien” puedes reaccionar ante comentarios negativos y “trolleadas” que a muchos les encanta hacer.
Procesar efectivamente comentarios negativos o de burla toma un tiempo. ¿A qué me refiero? Tienes que entender que quienes sueltan estos comentarios no necesariamente te conocen y por ende no saben mucho de ti como para que su comentario sea válido.
En mi caso (como el de muchos otros que comienzan en el mundo del streaming) solo me queda reírme y tomarlo de la mejor forma. Todas las veces que me han querido “trolear” o decirme algo negativo, siempre me he reído. Y no solo del comentario sino de mí misma. Y es que es algo que he aprendido a lo largo de mi vida: Tomar estos comentaros de manera tan personal no tiene ningún sentido. Tiene tan poco sentido como el no poder reírte de ti mismo. ¿Quién no la ha fregado? ¿Quién no se cayó alguna vez? ¿Quién no ha cometido errores? Hasta el más hardcore de los hardcores alguna vez fue noob.
Y claro no siempre se puede tener correa. No me gusta responder a comentarios negativos, pero a veces es inevitable si estás en modo rage (porque no fue un buen día tal vez y quieres desquitarte un poco) y sí, te gana responder. Y lo admito, a veces es divertido, pero sé que no es bueno. Desafortunadamente, y no importa el grosor de la correa, todo lo negativo surte algún efecto en nosotros. Somos humanos, pues.
Tener correa no es fácil, pero esto te ayuda a saber más de ti y a reírte de lo que te puedan decir los demás. Tomarlo de la mejor forma es un proceso interno; no todos la tenemos fácil pero es parte del paquete si te decides a hacer streaming.
El ser mejor cada día, para todo en la vida, requiere tener correa.
