Intel retoma la corona que arriesgó durante un tiempo frente a AMD: el título de tener el CPU comercial más poderoso del mercado. Nuevas mediciones confirmaron la ventaja del procesador Intel Core i9-7960X frente al AMD Threadripper 1950X.
Diversos portales web especializados en hardware como ArsTechnica, PCGamer y HotHardware hicieron sus propios reviews, y estos confirmaron las filtraciones realizadas en julio. En pruebas como 3DMark Firestrike, Geekbench 4, Cinebench y STARS Euler3D, el procesador de Intel vence al Threadripper con márgenes cómodos.
Lo mismo sucede en los benchmarks de juegos, aunque con diferencias menos marcadas. Particularmente para DirectX 11 las ventajas son mínimas (aunque la velocidad de cada núcleo en GHz aún es apreciable). En unos pocos casos, Threadripper 1950X muestra ocasionalmente un pico de FPS mayor. Pero la velocidad de FPS promedio, que es la que finalmente marca la experiencia de juego, es terreno del procesador de Corei9.
No tan rápido…
Entonces todo está bien nuevamente para Intel, ¿verdad? No exactamente, porque a pesar de tener una ventaja innegable en potencia, Intel vuelve a sus viejos hábitos en cuanto a precio y consumo energético.
En Estados Unidos, la Core i9-7960X cuesta nada menos que $1700, mientras que una Threadripper 1950X puede encontrarse a $1000. Y las ganancias en potencia, tanto para gaming como para actividades productivas, no parecen justificar el precio.
También existe un mayor consumo del CPU de Intel frente al de AMD. Si bien en condiciones normales requieren cargas de energía similares, al hace overclock la cosa cambia. Ars Technica registró una demanda de 600W con un Core i9-7960X overclockeado a 4.1 Ghz. Además afirma que para lograrlo, es prácticamente obligatorio el uso de caros sistemas de enfriamiento líquido. Sin embargo, estos resultados contrastan frente a los de HotHardware, que muestran un menor consumo del CPU de Intel cuando no se realiza overclock, tanto en modo idle como load.