La siguiente generación de consolas tendrá en su núcleo chips AMD, así lo ha confirmado la misma presidenta de AMD, Lisa Su, en una reciente entrevista con CNBC.
«Nos encontramos trabajando con Sony y Microsoft en sus consolas» y «en su salsa secreta» fueron las declaraciones de la presidenta por lo que AMD tendrá en exclusiva la misión de crear los chips que alimenten a la PlayStation 5 y a la Xbox Project Scarlett.
El término gracioso «salsa secreta» puede que haga referencia a la potencia requerida para que tanto la PS5 y Scarlett puedan correr los juegos en 4K y 60 fps sin problema alguno. Potencia que AMD ya había teorizado y calculado en unos 7,4 TFLOP, considerando que la Xbox One X, la consola más potente del mercado actual llega a los 6 TFLOP, no debería ser considerado imposible.
En el caso de la PS5, ya se sabía que AMD fabricaría un SoC (System on a Chip) personalizado para la consola de Sony basado en su nueva arquitectura de GPU llamada Navi, pero ahora se le sumará Microsoft. Y si ambos deciden ir por las instrucciones x86, entonces usarán la arquitectura Zen, por lo que sería un gran salto en performance con respecto a las consolas actuales que usan núcleos Jaguar que fueron diseñados para consumir menos energía, no para ofrecer el máximo rendimiento.
Entonces, considerando que AMD trabajará para ambas consolas, dependerá de lo que cada compañía desarrolle para ver la potencia final de sus consolas. Además, también parece que la guerra ya no solo serán los TFLOPS, sino también de los rayos para raytracing.
Con todo esto AMD se ha colocado en un lugar privilegiado en el que prácticamente no tiene competencia. Intel está que sufre con mantener la oferta de sus procesadores, llegar a los 10 nm y su tarjeta gráfica no llegará hasta 2020; y NVIDIA no es devota de personalizar sus chips y son relativamente más costosas lo cual es contraproducente para incorporar en una consola.