Animatissimo el concierto sinfónico de música de anime y videojuegos, se presentó este fin de semana en el Gran Teatro Nacional en fecha doble. Esta es nuestra crónica del concierto del día viernes.
El reloj marca las 6 de la tarde, las avenidas se llenan rápidamente de gente que sale de su trabajo o centro de estudios para enfrentarse al tradicional tráfico limeño. Pero esta noche es diferente, esta noche se respira cultura, se respira música y nostalgia, se respira nuestra infancia y adolescencia. Esta noche nos vamos a una fiesta muy especial.
Dicen que todos los caminos conducen a Roma, pues en esta ocasión Roma es el Gran Teatro Nacional. Este escenario, ubicado en el distrito de San Borja, uno de los más nuevos y modernos de América, es ahora el epicentro de la cultura geek de Perú, donde gamers y otakus llegan de todas partes para celebrar la música con la que crecieron, pero en un formato distinto; el formato sinfónico.
A ellos se suma una gran cantidad de asistentes que son asiduos a la música académica, aquellos que están acostumbrados a escuchar las grandes piezas de Beethoven, Mozart o Tchaikovsky y que en su vida se hubieran imaginado asistir a un concierto con temas de Pokémon, Candy Candy o Super Mario Bros.
Se trata del choque de dos mundos, pero éste es un choque planificado que se da en las condiciones perfectas para que ambos grupos se fusionen en un mismo aplauso al talento de los jóvenes artistas que se van a presentar.
“Animatissimo” concierto sinfónico de música de anime y videojuegos, es el título del espectáculo que llenó las más de 1400 butacas en su fecha del día viernes 3 de febrero, por lo que se tuvo que abrir una segunda fecha para el día 5 de febrero, el cual se agotó en mucho menos tiempo.
Llegada al Gran Teatro Nacional
Desde la puerta de ingreso el personal te recibe muy calurosamente y te guía a tu ubicación respectiva. Muchos asistentes ingresarán al Gran Teatro Nacional por primera vez en su vida y disfrutarán de su majestuosidad.
La primera vez que visité el GTN allá por el año 2013, curiosamente también fue para un concierto de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil, pero en esa oportunidad tenía como invitado al violinista estadounidense de origen israelí Gil Shaham, uno de los mejores del mundo. Uno de los integrantes de esa orquesta estará esta noche parado sobre el podio de director.
El reloj marca las 8 de la noche y se realizan las respectivas llamadas al público para que se ubiquen en sus asientos. Padres de todas las edades, algunos muy elegantes y otros con el polo de su videojuego favorito se ubican junto a sus hijos, niños o adolescentes. En los pisos superiores pude ver algunas parejas o grupos grandes de amigos, incluso familias enteras, hasta con los abuelos y tíos. Sin duda un espectáculo para toda la familia.
Si bien se vendieron todas las entradas, lamentablemente no todos los asientos se llenaron. En algunos casos por personas que llegaron tarde, víctimas del tráfico limeño o por simple descuido y otros por la deplorable reventa de entradas a las afueras del teatro. Algunos incluso pudieron percatarse que se trataban de las entradas de cortesía, algo que hace meditar bastante…
Las luces se apagan y los músicos entran a escena, seguido de Pablo Sabat, director artístico de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil Bicentenario, quien dá unas palabras de bienvenida, una divertida referencia sobre su rol en la orquesta, para luego presentar al director invitado de la noche: Gabriel Vizcarra.
Las luces se apagan: Animatissimo empieza
Esta noche, Gabriel dirigirá a la orquesta donde hace solo unos cuantos años atrás también formó parte. Con un rápido ademán, se escuchan las primera notas de “Trainer Battle” de Junichi Masuda. Casi al mismo tiempo, se empiezan a proyectar las imágenes del videojuego y el anime de Pokémon en la pantalla gigante, por lo que es inevitable sentir uno, dos y hasta más de tres escalofríos por todo el cuerpo.
Para los que disfrutan de la música de los videojuegos, no hay nada más hermoso que escuchar nuestras melodías favoritas de 8 bits transformadas en violines, clarinetes, oboes y trompetas, por lo que el “tema de calentamiento de la noche” incluso puede lograr un mayor impacto que otro tema del repertorio.
Luego de los aplausos se escucha “Howl’s Moving Castle”, tema de la película de animación japonesa del maestro Hayao Miyazaki. La interpretación perfecta por los jóvenes de la orquesta nos ayuda a navegar sin distracciones a través de las imágenes de la película y recordar esa emocionante historia, llena de la magia, dulzura y fantasía que tanto caracteriza a Miyazaki y que se refleja de manera perfecta en cada nota compuesta por Joe Hisaishi.
Al terminar cada tema, se abren brevemente las puertas del auditorio para hacer pasar a las personas que llegaron tarde. Con el andar de los minutos, se fueron llenando las butacas vacías.
Uno de los temas que más ganas tenía por oír fue el de Shadow of the Colossus, videojuego de Fumito Ueda, que nos cuenta una historia de aventura épica, pero también trágica. Compuesto por Kō Ōtani, se caracteriza por la fuerza y energía que desprenden, especialmente por el uso intenso de las percusiones y vientos, que por breves momentos sonaron un poco más rápido de lo normal, pero sin perder calidad.
Luego siguió “Fly me to the Moon”, que precisamente no es un tema propio del anime Neon Genesis Evangelion, sino una adaptación de Toshi Omori al tema original de Bart Howard y que se hizo famosa a nivel mundial al ser cantada por Frank Sinatra. A MODO PERSONAL debo decir que, si bien tuvo una interpretación muy buena, creo que restó un poco de fuerza a lo que se venía escuchando hasta el momento, especialmente al poner el tema inmediatamente después al de Shadow of the Colossus.
Otro de los temas que más esperaba oír fue el “Main Theme” de Final Fantasy VII, juego que curiosamente nunca terminé pero me enamoró hace muchos años atrás por su música, compuesta por el fantástico Nobuo Uematsu. De principio a fin todo fue perfecto, respetando cada momento intenso y la calma de la parte final. Me hizo cerrar los ojos y balancearme sobre mi asiento, como si yo tuviera en el lugar de Gabriel Vizcarra, dirigiendo la orquesta. Sin palabras.
La primera mitad cierra con “Greatest Hits” de Saint Seiya, o para algunos simplemente “Los Caballeros del Zodíaco”. Compuesto por Seiji Yokoyama, inició con los intensos acordes de violín que tanto caracteriza al anime. “DAME TU FUERZA PEGASO”, fue el gritó de Gabriel que retumbó hasta la avenida Javier Prado, ya que en una movida muy astuta de la organización, se decidió proyectar el concierto en vivo en una pantalla en los exteriores del teatro. ¡MEGA WIN!
Intermedio
Se dieron 15 minutos de intermedio donde algunos salieron raudamente a los servicios higiénicos o por algo de comida, todos con una sonrisa en el rostro.
Luego del descanso toca la hora de la nostalgia para los más grandes con los temas de “Candy Candy” (Mitsuko Horie & The Chirps) y “Marco” (José Torregosa). Iniciaba el tema cuando Gabriel se da vuelta hacia el público y los invita a cantar. Entre la sorpresa y las risas de los asistentes, las voces tímidas se volvieron más intensas a medida que los acordes se hacían más fuertes, para luego apagarse cuando, como me sucedió también a mí, se olvidaron la letra en las siguientes estrofas. El plato se repitió con el tema de Marco, del cual recordaba mucho mejor la letra, por lo que se pudo cantar con mucha más fuerza. Al finalizar ambos temas, el público respondió con un fuerte aplauso y gritos de júbilo.
Para equilibrar la balanza con los asistentes más pequeños, siguió el tema del videojuego Super Mario Bros. Compuesto por Koji Kondo, el genio detrás de una de las melodías más pegajosas de la historia y que de seguro en algún momento usaste como ringtone. El arreglo fue hecho por “Video Games Live” que años atrás se presentaron junto a Gabriel Vizcarra y Animatissimo en el anfiteatro del Parque de la Exposición.
“Tonari no Totoro” es el tema de la otra película de Miyazaki que se pudo escuchar en la noche. Debo admitir que Mi Vecino Totoro es una de mis películas pendientes de ver, pero eso no evitó que me emocionara con los hermosos acordes del tema, interpretados magistralmente por la orquesta, lo que me hizo poner la película en mi lista de prioridades antes de que termine este mes.
Una de mis grandes expectativas era el tema de The Legend of Zelda, ya que como gran fan de la saga de Nintendo, me pareció muy interesante que no se enfoque en el tema principal (también de Koji Kondo), sino en dos temas particulares de su entrega llamada The Wind Waker, el cual tiene a mi parecer uno de los más variados soundtracks en toda la saga.
“The Legendary Hero” es un arreglo del tema original de TLOZ que se escucha al inicio del juego, cuando se relata los hechos históricos del reino de Hyrule a través de unos pergaminos. Es la primera vez que escucho en vivo este tema tocado con orquesta completa, respetando cada nota e instrumento para el que fue compuesto. Siguió “The Great Sea” con el cual pude recordar esos años de mi adolescencia, navegando por los mares y descubriendo secretos en cada isla. Debo agregar que la selección de escenas para el video que se proyectaba detrás pudo ser mejor.
Lamentablemente, parte de esta experiencia fue interrumpida cuando a unos cuantos metros de mi butaca, sonó un celular. Lo peor de todo es que por los altoparlantes se había repetido más de una vez la indicación de apagar celulares durante la presentación. Aún falta mucho por educar a las personas para que aprendan a respetar tanto a los otros asistentes como a los artistas sobre el escenario.
Es momento de otro anime clásico con los acordes de “Bara Wa Utsukushiku Chiru” de Lady Oscar. Este tema, con nombre de trabalenguas japoneses, fue compuesto por Kouji Makaino, siendo uno de los más recurrentes de Animatissimo en sus presentaciones, a pedido de los fans. Algo que siempre los deja contentos.
El concierto llegaba a su fin con las notas de uno de los temas de videojuegos más hermosos que se han compuesto. “Hikari” de Kingdom Hearts, tema de Yoko Shimomura, nos llena de emoción por su inicio lento, para luego ir subiendo el nivel de intensidad con los violines y platillos, mientras en el fondo vemos a los clásicos personajes de Disney luchando por salvar su mundo. El final perfecto para la noche.
La sorpresa de la noche
Luego de un atronador aplauso en toda la sala, Gabriel reingresa, micrófono en mano, para agradecer a los asistentes, los músicos y toda la gente detrás de la organización que hizo posible el evento. Cuando se encontraba a punto retirarse, una personalidad maligna ingresó en el escenario para someterlo bajo el poder del Lado Oscuro y obligarlo a tocar un tema en su honor. Fue así como Darth Vader se convirtió la cereza del pastel de una noche fantástica. Entre las risas y gritos del público, se pudo escuchar uno de los temas más famosos de la historia del cine (y videojuegos).
La Marcha Imperial del compositor John Williams retumbó con la toda la intensidad de las trompetas y trombones, mientras detrás de proyectaban imágenes de algunos videojuegos de Star Wars como Battlefront o The Force Unleashed, que tienen como principal figura al padre de Luke Skywalker (¡SPOILER!).
No podía terminar de mejor manera, una noche fantástica que esperamos se repita muchas más veces durante el año. Después de todo, tanto la gente del Ministerio de Cultura, como la del Gran Teatro Nacional ha quedado muy satisfechos con la respuesta del público. Solamente queda que nosotros sigamos apoyando estas iniciativas para que cada vez crezca más el público de estos eventos.
Mi tema favorito: Shadow of the Colossus y Mi Vecino Totoro.
El tema que hubiera cambiado: Fly me to the Moon. Me hubiese gustado escuchar algo de Dragon Ball Z o Fullmetal Alchemist.
Lo malo: La gente que no sabe respetar simples reglas: Apagar celulares durante la función, no filmar.
Lo inesperado: La hora del karaoke y Darth Vader.
Los que faltaron: Debo aclarar que en general quedé muy satisfecho por los temas de la noche y sé también que esto sería una lista interminable, lo que da a pie a muchos conciertos de este tipo. Pero tengo un particular gusto por la música de Journey y Abzu de Austin Wintory, Gaur Plains de Xenoblade, el tema principal de Okami y mi mayor anhelo de escuchar en vivo, el tema de los créditos de The Legend of Zelda: Twilight Princess.
Lo feo: 2 horas es muy poco tiempo para disfrutar de esta excelente orquesta.
De momento les recomiendo estar atentos a las próximas presentaciones de la Orquesta Sinfónica Nacional Juvenil Bicentenario que verdaderamente son un gran grupo de jóvenes artistas con muchas ganas y energía de demostrar su talento y pasión por lo que hacen.
¡Y quiero felicitar nuevamente a mi buen amigo Gabriel Vizcarra por el proyecto Animatissimo y desearle éxitos en todo lo que le depare en el futuro!
Muchas gracias a Aldair Mejia por permitirnos usar sus fotos para la nota.