Cuando era más joven un amigo me dijo «mi padre me enseño lo que no es ser padre». Muchas veces en nuestra juventud podemos llegar a estar en desacuerdo con algunas ideas de nuestros padres. Eso es normal, porque nadie nos enseña a como ser padres. No existe una guía o manual para aprender a ser padre, tampoco es un conocimiento que podamos adquirir tras una misión o subiendo de nivel. En el proceso de la crianza de un hijo podemos cometer muchos errores, porque debemos de adaptarnos a esta nueva etapa de nuestras vidas.
¿Un Cambio difícil?
Convertirse en padre es un gran cambio. Equilibrar el ser Padre y Gamer muchas veces resulta un poco difícil, porque tienes que alinear tus nuevos deberes con el poder jugar, en ocasiones puedes llegar a sacrificar esas horas para dedicar tiempo para tú hijo. Por este motivo en esta ocasión hablaré un poco de mi experiencia.
Me gustan los videojuegos desde que tengo memoria. Recuerdo que cuando tenía 5 años, teníamos una PC 386. Era toda una belleza, desde en ese entonces me emocionaba la idea del cómo hacían para que esos pequeños cuadros de colores se movieran.
En estos largos años, los videojuegos, nos han dejado lecciones importantes, porque muchos de ellos no solo se tratan de completar el juego, podemos encontrar la importancia de la amistad, lealtad, honor y entre otras valiosas lecciones.
Como gamers hemos vivido grandes aventuras, protegidos reinos, mundos hasta universos, pero a pesar de todas las enseñanzas que nos puedan dejar los videojuegos, nada en esta vida nos prepara para ser padres.
Una de las premisas de ser padre es que vas a tener que enseñar a tu hijo y serás su guía a lo largo de su vida. Pero está muy alejado de la realidad, tu hijo también puede enseñarte. Pero es una gran responsabilidad, porque tendremos que tomar muchas decisiones que pueden influenciar en el futuro de nuestro hijo.
En los dos primeros años deberás de aprender los tipos de llantos, que significa cada gesto o sonido que haga para poder atenderlo de mejor forma. La única forma que tendrá de comunicarse durante el primer año será con solo llantos, mientras va creciendo se es más fácil, ya estarás más familiarizado con su forma básica de expresarse, también podrá hacer otros ruidos y hasta que pueda hablar algunas palabras.
También aprendes asumir otras responsabilidades, debes de dejar ciertos hábitos. Ya que tener un hijo te demanda mucho de tu tiempo y aquí viene una pregunta o dilema que muchos jugadores podrían pasar.
¿Debo de dejar los videojuegos en su totalidad?
Es una decisión que debes de evaluar, se presentaran muchas situaciones que podrían obligarte a dejar de ser Gamer. La idea de ser padre no es que dejes de ser tú mismo y te conviertas en una versión muy distinta de lo que eres. Se trata de ser mejor persona de lo que ya eres y no mandar toda tu esencia al tacho.
Yo llevo jugando World of Warcraft desde su lanzamiento, he disfrutado incontables aventuras con algunos clanes en los que he estado, pero es un juego que te demanda mucho tiempo, tiempo que por ahora no dispongo. Siento que World of Warcraft fue una etapa y era hora despedirse para poder iniciar otra, me apena un poco dejar Azeroth, pero sé que existen otros héroes que lo mantendrán a salvo o en su defecto vengaran a todos los ciudadanos de ese mundo tan hermoso que me ha brindado buenas aventuras.
Pero dejar World of Warcraft no es sinónimo de que he dejado de jugar, aún hay juegos que se adapten a mi limitado tiempo, como Monster Hunter que sus cacerías en solitario no pasan de los 10min a 15min. De esta forma cada uno de nosotros podemos encontrar juegos que nos agraden y se adapten al tiempo con el que contamos.
El hijo se convierte en padre
Mientras escribía mi artículo de Opinión sobre Super Mario Odyssey pensé en una frase “En su tiempo disfrute junto con mi padre Super Mario Bros y ahora disfruto Super Mario Odyssey con mi hijo”. Me resulto un poco extraño y a la vez me sentí un poco nostálgico al recordar mis primeros pasos como gamer.
Se siente bien compartir una actividad con tú hijo que ambos disfrutan, en mi caso me comenta lo que está pasando en pantalla, con una ilusión y sorpresa de lo que ve. Me emociona mucho cuando me ve con el mando y me pide Mario.
Este gusto por los videojuegos salió de él. Es cierto que algunos padres tienen la ilusión de compartir su hobby preferido con su hijo/s pero también es importante que ellos tomen la iniciativa por ellos mismos, para que puedan disfrutarlo más.
Orgullo de padre
La primera vez que vi a mi hijo fue una gran alegría, era una sensación totalmente distinta, es como si antes no hubiera sentido amor, fue algo realmente genial. La primera vez que lo cargue en mis brazos tenía un poco de temor, porque no quería lastimarlo mientras lo cargaba.
Ese día fue el más alegre de toda mi vida, incluso más que el día que anunciaron la expansión World of Warcraft: Wrath of the Lich King y el día de su lanzamiento. Me pregunto que habrá estado haciendo mi padre horas antes de que yo naciera. Antes de ir a la clínica yo estaba jugando Day One el World of Warcraft: Warlords of Draenor, esto fue porque el parto estaba planificado para algunos días después.
Ese día bromeamos que era muy impaciente y como se aburrió quiso salir ya. Desde ese día me sorprendo con cada ocurrencia que hace y me alegra el día con su chispa. Mi hijo cada vez que aprende algo nuevo al inicio pide ayuda y luego rechaza la ayuda que se le ofrece. Cuando aprendió a caminar iba agarrado de la mano y ahora ni el dedo quiere dar y dice que él puede solo. En cierto modo me causa gracia y ternura ese comportamiento, pero me siento feliz porque es un bebe independiente.
Aprobación de la mamá
Para las personas que tienen una esposa, novia o pareja que no esté tan vinculada con los videojuegos o su conocimiento sea nulo, puede llegar a ser un poco más complicado. Uno de los motivos es que llevamos años con “periodistas y expertos” satanizando los videojuegos y culpándolos de cualquier desgracia.
Cuando el mayor culpable somos nosotros como padres, si dejamos que nuestro hijo se eduque a base de videojuegos y no tenemos una atención debida con nuestros hijos, no podremos guiarlos de la mejor manera. Es fácil culpar a un tercero antes de admitir una culpa real. Les dejare un video en donde hablamos sobre la controversia en los videojuegos.
Regresando al tema central de este apartado, siempre existirá un miedo de que los videojuegos sean dañinos para nuestros hijos, por la falta de conocimiento y la mala distribución de la información con respecto a este tema. Lo ideal es hablar, tratar de llegar a un acuerdo.
Mi esposa me dijo que nada de videojuegos para nuestro hijo, reacción totalmente normal, teniendo en cuenta de que nunca había jugado, pero después de una charla pudimos llegar a un acuerdo.
Es importante que en la etapa de salientes no dejen su hobby de los videojuegos, porque sería negar una parte nuestra, como dije anteriormente lo importante es mejorar y no dejar de ser la persona que somos.
Palabras finales
Este artículo de opinión no pretende ser una guía de cómo llevar tu rol de padre y seguir con tú hobby, solo intento trasmitirles un poco mi experiencia, aún me falta mucho camino por recorrer.
Si me preguntan si existe algún momento de estar listos, creo que no existe un momento adecuado o una edad correcta, porque la responsabilidad es muy grande y se debe de tomar esa decisión como pareja. Deben de evaluar muy bien, porque no es un juego, no podrás darle replay por cada decisión mala que tomes. Pero cada momento que pases con tu hijo/s valdrá la pena.