Satoru Iwata, presidente de Nintendo, indicó que la compañía espera vender 2.8 millones de Wii U al cierre de su año fiscal a fines del mes de marzo, disminuyendo el objetivo inicial de 9 millones de consolas vendidas. Además la proyección de ventas del 3DS también ha sido recortada de 18 millones a 13.5 millones de consolas.
Con los números inicialmente proyectados, Nintendo esperaba obtener una ganancia neta de 55 billones de yens, sin embargo, con las nuevas proyecciones estarían perdiendo 25 billones de yens.
Los diversos recortes que el Wii U ha tenido durante el 2013 y los bundles no contribuyeron en mejorar la situación de Nintendo en el mercado americano.
Según el mismo Iwata indicó: «En particular, las ventas en los mercados americanos y europeos (…), fueron significativamente menores que nuestras predicciones originales, de forma que la venta de hardware como de software se encontraban muy lejos del objetivo.»
En octubre del año pasado, se reveló que Nintendo solo había podido vender menos de 500,000 Wii U en 6 meses. Sin embargo, el PS4 de Sony logró la cifra de 4.2 millones de consolas vendidas desde su lanzamiento oficial en noviembre del año pasado, mientras que el Xbox One de Microsoft ha sobrepasado los 3 millones de ventas.