El cuarto Final Fantasy más vendido, Final Fantasy VIII, tiene ya dos décadas desde su exitoso lanzamiento en PlayStation 1
Una de las características más interesantes de Final Fantasy como franquicia es lo distinto que es cada entrega. FFI es una reliquia, FFVI es uno de los títulos más importantes del SNES, FFXIII fue una decepción mundial, etc. Entre estos, Final Fantasy VIII siempre ha tenido una reputación interesante, ni adorado ni odiado. Y sus fans hoy pueden celebrar que la octava entrega principal de FF ha cumplido dos décadas.
Este título – que se lanzó para PS1 en Japón en 1999 – representa varios experimentos e ideas nuevas para la franquicia. Se les dio mucho peso a los protagonistas (Squall y Rinoa) y a su desarrollo a lo largo de la historia, idea que sería realizada otra vez (con quizás mayor éxito) en Final Fantasy X. Algunas de sus ideas (como el uso de fondos pre-rendered y cutscenes de alto calibre) fueron tomadas de FFVII.
Los dos cambios más importantes que trajo Final Fantasy VIII fueron el sistema de combate y Triple Triad. El sistema de combate adquirió una forma de balancearse, permitiendo que los niveles de los enemigos aumenten cuando el nivel de Squall aumentaba. En cuantos a Guardian Force, esto permitió que los summons se vuelvan componentes fundamentales para alterar las estadísticas de los personajes y aprender habilidades con usos tanto dentro como fuera del combate.
En este momento, Final Fantasy VIII está disponible en PC, PS1, PS3, PSP y PS Vita. Tanto FFVII como FFIX van a ser relanzados en nuevas plataformas pero FFVIII no tuvo la misma suerte.