El iPhone alista un importante cambio: la inclusión de una pantalla flexible. El teléfono de Apple contará con estas pantallas gracias a LG, empresa que ya está preparando una división para enfocarse en la fabricación de estas pantallas.
¿Por qué Apple se aliaría con LG? Porque no desea darle más combustible a Samsung, su mayor rival en el mercado de smartphones, y empresa que ha venido fabricando pantallas para varios modelos anteriores del iPhone.
En lugar de ello, LG Display desarrollará la pantalla como tal, mientras que LG Innotek estará a cargo de la placa de circuitos. Esta también deberá tener un grado de flexibilidad para poder soportar los requerimientos de resistencia del teléfono, según reporta The Investor.
Además de ser flexible, la pantalla de este teléfono sería del tipo OLED, que ofrece mayor contraste y colores más reales que las pantallas LED convencionales. LG ya tenía un prototipo de pantalla OLED flexible desde hace tres años, por lo que Apple se asocia con ellos para que esta tecnología esté presente en los iPhone.
Y como Samsung es en la actualidad el más grande productor de pantallas OLED del mercado, Apple está apostando por su competidora para poder enfrentar al fabricante de los teléfonos Galaxy. Se espera que la producción de pantallas comience en el 2019, y lanzar a la venta los equipos en el 2020.
Será interesante ver cómo es que un iPhone con pantallas flexibles es capaz de revitalizar la línea de teléfonos más conocida de la actualidad. El iPhone X parece estar en la mira de todos, a expensas del iPhone 8, que registra ventas menores y problemas técnicos con las baterías.