No todas pueden ser buenas noticias para la Nintendo Switch. Aunque no son tan malas para algunos fans de este sistema. La Switch ha sido hackeada nuevamente, y los perpetradores han logrado nada menos que correr el sistema operativo Linux. Esto ha sido posible gracias a un bug incrustado en el hardware, y que no parece ser fácil de corregir.
El conocido grupo de hackers fail0verflow determinó hace unas semana que existe una brecha de seguridad en el sector de arranque de la Nintendo Switch, y esto les permitió ejecutar código externo. En este caso, un sistema operativo completo con todos los privilegios de administración, que cargará cuando se reinicie la consola.
Peor aún, el bug que permite que la Switch corra Linux proviene del hardware, y no puede ser reparado fácilmente, según reporta Segment Next. Es más probable que Nintendo tenga que solucionarlo recién en consolas recién fabricadas, y no pueda hacerlo en las que ya están en el mercado. Esperamos que en los próximos días se muestren las capacidades de la Switch con Linux, como correr aplicaciones, navegador, y juegos para este sistema.
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— fail0verflow (@fail0verflow) 6 de febrero de 2018
Esto se suma al hack que se logró a fines de diciembre, y que permitió acceder al kernel de la Nintendo Switch gracias a un bug en el sistema gráfico Tegra X1 de Nvidia. Dicho bypass tenía el potencial de permitir la ejecución de juegos piratas, y acceder a otras funciones ocultas en el sistema, como la ejecución de apps. Sin embargo, solo funcionaba con el firmware versión 3.0.0 de la Nintendo Switch.