En 1996, el reconocido director Wes Craven (R.I.P) sorprendía a todos con una nueva película slasher donde un misterioso asesino iba acabando con la vida de varios estudiantes en el pueblo de Woodsboro.
La primera cinta de Scream se hizo muy popular por aquel entonces porque Craven fue capaz de revitalizar un género que ya estaba de capa caída después de una sobreexplotación de diferentes productoras.
Scream no es ajeno a tener un villano que va a acabando con universitarios amantes de fiestas, alcohol, y otras actividades, pero la gracia estaba en sus chistes meta, además de hacer icónica la máscara de Ghostface.
El éxito de la primera cinta llevó a la creación de hasta tres películas, todas dirigidas por Wes Craven. Lamentablemente, el director falleció en 2015, lo que llevó a que la franquicia quedará estancada.
Finalmente, después de mucho tiempo, tendremos una nueva película de Ghostface, teniendo a Kevin Williamson, guionista de las primeras cintas, pero esta vez con la dirección de Matt Bettinelli-Olpin y Tyler Gillett.
La nueva película de Scream llegará este 14 de enero, marcando el regreso de tres actores originales de las anteriores cintas (Neve Campbell, David Arquette y Courteney Cox)
Esta semana salieron las primeras críticas, gracias a que varios periodistas tuvieron la oportunidad de asistir a una función especial. Sorprendentemente, todos están de acuerdo con que es una muy buena película, que sabe respetar el legado de Wes Craven, y está al nivel de la primera cinta.