Si hacemos una investigación, y buscamos quien fue el que dio origen a los videojuegos, es más que seguro que encontraremos a Ralph H. Baer, ingeniero e inventor, reconocido por muchos como el padre de los videojuegos, lamentablemente falleció este fin de semana (6 de diciembre) a los 92 años en su casa de New Hampshire, EE.UU.
Antes de que Sony, Microsoft y Nintendo sueñen con hacer videojuegos, Ralph H. Baer ya tenia años de haber creado la primera consola de videojuegos.
Genio, inventor, visionario, son algunos de los adjetivos de los miles que se le pueden describir a Ralph, entre sus creaciones más conocidas esta la legendaria Magnavox Odyssey, la primera consola casera de videojuegos, está se salio a la venta en 1972.
Nacido en Alemania en el año 1922, era de origen judio y su familia escapo de país por lo de la segunda guerra mundial, refugiándose en algunos paises de Europa, hasta que finalmente se establecieron en EEUU. Baer también patentó 150 inventos, entre ellos la primera pistola de luz y se jubiló en 1988.
Ralph Baer pertenece al Salón Nacional de la Fama de los Inventores y fue galardonado por el gobierno estadounidense con la Medalla Nacional de Tecnología en 2006.
«Aún recuerdo a toda la gente, 40 años atrás, que me decía que dejara de tonterias o hacían comentarios como: ‘aún sigues perdiendo el tiempo con esas cosas’ y si no hubiera seguido adelante, no estaría aquí hoy.», declaró Baer en 2008 cuando recibió el premio de Pionero en la Game Developers Conference. «Las cosas, ciertamente hubieran sido diferentes. Es un privilegio estar aquí. Muchas gracias. Y aún sigo inventando cosas.», añadió.
«Ralph era un hombre generoso, fantástico y brillante. Podías pasar horas con él y olvidar que estabas en compañía de alguien de su edad. Mantuvo un entusiasmo jovial hasta el final, pasando tanto tiempo como pudo en un proyecto u otro.», declaró el historiador Leonard Herman.
De parte del Staff de MásGamers lamentamos esta fuerte perdida para la industria de los videojuegos, solo nos queda agradecer este nuevo mundo que nos enseñaste, y aprender de ti que siempre hay que creer en nuestros sueños. Muchas Gracias Ralph.
