INTRODUCCIÓN
MSI, la taiwanesa líder en el mercado gaming, nos sorprende una vez más con su versión de la tarjeta de gama alta de NVidia, la GTX 1080. En esta ocasión, nos trae la segunda tarjeta más potente de toda su línea, la MSI GeForce GTX 1080 Gaming X 8G, la cual se diferencia de su versión Gaming Z sólo en que tiene de fábrica una menor frecuencia de reloj. Hasta ver si lanzan una versión Lightning como la que sacaron para la 980ti, podemos decir que este modelo es uno de los buques insignia de la taiwanesa, trayéndonos una muy buena frecuencia, ventilación más eficiente y silenciosa que de otros modelos y marcas que están en el mercado.
Pero sabemos que otras marcas también tienen sus propias versiones de esta bestia del rendimiento gráfico, así que nos preguntamos ¿qué es lo que diferenciaría a MSI de sus otros (y muy buenos) competidores? Vamos a verlo.
FICHA TÉCNICA
Digna representante de la arquitectura Pascal de NVIDIA, la Gaming X 8G de MSI está orientada a los jugadores que desean gozar de la máxima calidad gráfica en resoluciones superiores al Full HD, aprovechando sus bondades en monitores 4K y la hasta ahora no muy difundida Realidad Virtual, con un framerate constante. Aunque claro, para aquellos que quieran todo eso en 4K y 60 fps, les adelantamos que necesitarán optar por la configuración SLI.
Esta MSI Gaming X 8G trae un conector de alimentación de 6 + 8 pines, que como vemos se diferencia de otras GTX 1080 como la Founders Edition que sólo necesitan el de 8 pines, ya que se necesita este adicional para poder hacer funcionar los ventiladores así como para poder hacerle OC. Con unos ventiladores que funcionan tan bien y aportan a reducir la temperatura durante el OC, créannos que vale la pena este adicional.
PRIMERAS IMPRESIONES
Tal y como lo habíamos comentado hace un tiempo con su versión de GTX 1050ti, la Gaming X 8G cuenta también con los exclusivos ventiladores Twin Frozr VI, además de tener 8 GB de VRAM, ser compatible también con DirectX 12, pero sobre todo ser una tarjeta gráfica VR Ready, VR Works y Ansel, permitiéndote esta última hacer tomas en 360° mientras juegas. Adicional a ello notamos que, también como su hermana menor, esta tarjeta cuenta con iluminación RGB LED, la cual te permite personalizar por completo los efectos de colores de la tarjeta mediante su Gaming App.
Si echamos un vistazo más cercano a sus conectores, comprobaremos que cuenta con triple salida para Display Port, una salida para HDMI y una última para DL-DVI-D.
En el lateral tenemos la marca MSI con el Dragón que es el emblema de la serie Gaming, estos se iluminan con un LED Blanco al momento de encender la PC y es configurable con GAMING APP, como ya habíamos mencionado.
Además les podemos mostrar el mencionado conector de 6+8 pines para la alimentación de la tarjeta. Este adicional de 6 es usado para darle energía al sistema de ventiladores Twin Frozr VI y además darle ese toque adicional (y necesario) de energía para poder hacer OC.
UNA VISTA MÁS DE CERCA
Si queremos ver un detalle más completo en esta sección lo podemos revisar.
Como la mayoría de las tarjetas NVIDIA customizadas por otros fabricantes, la cubierta de la Gaming X está hecha casi en su totalidad de plástico. Debajo de ella, un marco que a simple vista se ve bastante resistente le brinda una mejor estabilidad de la que hemos visto en otros productos de su tipo.
Con un peso de 1.1 kg, a la Gaming X 8G no se le puede considerar muy ligera que digamos. Tiene una longitud de 28.4 cm, 13.5 cm de alto y 3.5 cm de ancho, lo cual hace que ocupe el espacio de 2 ranuras de nuestro case.
Sobre la parte trasera de la tarjeta, vale decir que está cubierta por un backplate de una sola pieza con una serie de orificios que ayudan a la ventilación, aunque no está conectada en ningún punto al PCB, de manera que ayuda muy poco a la ventilación.
Es importante mencionar que si lo que quieren es quitar el backplate y no tienen un desarmador lo suficientemente pequeño, es muy probable que sufran un poco ya que los tornillos son bastante pequeños.
Sobre las vista laterales, debemos decir que esta Gaming X resalta el logo iluminado de MSI y los tres tubos de disipación de calor de los cuales dos son 6mm y uno de 8 mm de grosor. Por su lado, el conector de energía PCI está invertido 180° respecto a los modelos de GTX 1080 de otros fabricantes.
Ahora pasemos a ver el PCB, por lo que empezaremos desarmando la cubierta…
MSI pone bastante énfasis en el sistema de refrigeración de su Gaming X, y la verdad vemos que se ha hecho un buen trabajo en este apartado. Un sólido marco cubre la placa, a excepción de la que tiene el cooler de los VRM (reguladores de voltaje).
Vemos también que hay pads térmicos entre los módulos de memoria y el marco, junto con los VRM y su cooler, para facilitar la transferencia de calor entre ellos. Quizá hubiese podido ser mejor un diseño más delgado en vista que los ventiladores de MSI no giran tan rápido (por el énfasis en ser silenciosos), de modo que pareciera (a simple vista, claro está) que esto limitaría de algún modo el flujo de aire.
Una vez desarmado, vemos que estos ventiladores no estaban hechos en vano, ya que se encargan de enfriar los 5 heat pipes cubiertos de níquel (4 de 6 mm y 1 de 8 mm de ancho). Todos los heat pipes al final se juntan en un solo bloque también niquelado.
La 1080 Gaming X usa módulos de memoria GDDR5X de marca Micron (la que hace algún tiempo tuvo unos problemas, ahora ya resueltos), los cuales son vendidos junto a la GPU de Nvidia a los partners fabricantes. Los 8 chips de memoria transfieren a 10 MT/s con una interfaz de 256 bit, permitiendo un ancho de banda teórico de 320 GB/s.
Esta es la parte trasera del PCB que, como pueden ver, gracias a las nuevas tecnologias de fabricación se pueden extraer la mayoria de protuberancias afiladas, en este caso las soldaduras, esto es para cuidar los componentes ya que se pueden dañar por la estática. Se añaden además dos condensadores instalados justo debajo de la GPU para absorber y estabilizar los picos de voltaje, tal y como ocurre con el modelo Founders Edition.
GAMING APP
Gracias a este software puedes elegir la configuración de la tarjeta de video y hasta poder controlar las frecuencias con tan solo haciendo un click en OC Mode, Gaming Mode y Silent Mode, además, puedes controlar el LED lateral para darle efectos.
Evidentemente, si uno quiere lograr mejores resultados en el OC, es mejor realizarlo de manera manual utilizando el MSI Afterburner.
«Aquí debo señalar algo muy importante que me ocurrió cuando usaba la app en Windows. Cuando empecé a usar la app en Windows, no tuve problema con los juegos que estuve probando a excepción de Overwatch, de manera que el framerate del juego estaba extrañamente por debajo de los 60 fps cuando con la GTX 1070 que siempre uso siempre se mantuvo por encima de los 90. El problema se mantuvo hasta que desinstalé la app, luego de lo cual subió el framerate al nivel esperado. Así que si lo que desean es jugar Overwatch, tomen este dato en cuenta, y espero que esto se pueda arreglar por parte de MSI.»
PRUEBAS Y MONITOREO
Para empezar debemos detallar cuál fue la configuración usada para las pruebas:
Procesador | Intel Core i5 6600K |
Motherboard | Asus Pro Gaming Z170i |
GPU | MSI GTX 1080 Gaming X 8G |
Memoria | Corsair Vengeance LPX 16 GB @ 2400 Mhz |
Almacenamiento | 2 x SSD Corsair Neutron GTX 120 GB en modo Raid-0 |
PSU | Thermaltake Toughpower XT 1275 W 80 Platinum |
Monitor | Viewsonic XG2401 144Hz 1ms |
Sistema Operativo | Windows 10 Pro 64-bits Versión 1607 |
Versión de driver | NVIDIA 378.66 |
Vale decir que todas las pruebas que realizamos se hicieron con la misma configuración del equipo, así mismo los juegos y benchmark se hicieron en la más alta calidad posible.
Démosle un vistazo a las temperaturas de la tarjeta en uso con algunos juegos desde los menos exigentes como Overwatch o Battlefield 1 hasta algunos muy exigentes como Doom, The Witcher 3 o Gears of War 4, medido con algunas aplicaciones de monitorización como:
- MSI AfterBurnner
- HWiNFO
- GPU-Z
Resultados máximos con GPU-Z
Resultados con HWinfo
En estado inactivo o de bajo procesamiento, la tarjeta se mantiene a unos 37°C mientras que con juegos exigentes como Gears of War 4 llegó hasta los 80°C.
3DMARK BENCHMARK
TimeSpy
Time Spy es una prueba de referencia de DirectX 12 para PC ejecutando Windows 10. Con su motor de DirectX 12 puro, construido desde la base apoyar la nueva API ofrece como cálculo asincrónico, explicit multi-adapter, y multi-threading, Time Spy es ideal para probar el rendimiento de DirectX 12 de las últimas tarjetas gráficas.
Como podemos ver, la MSI GTX 1080 Gaming X obtuvo un puntaje de 6845, corriendo en Ultra. En el primer test se pudo obtener 49.17 fps y en el segundo 44.78 fps, por lo que definitivamente esta tarjeta está dedicada a aquellos que quieran un desempeño extremo.
FireStrike Ultra
Fire Strike es una prueba dentro del paquete 3DMark que es usado para PCs que tienen capacidad de renderizar en 4K, y con esta 1080 vaya que lo podemos hacer.
Fire Strike exige al máximo al sistema para poder mostrar un resultado y según lo visto, la tarjeta sufriría para poder llegar al 4K en algún juego exigente, pero ¿será esto realmente cierto? ¿Será un estimado por el procesador?
Veamos qué tal va con los videojuegos probados directamente.
OVERCLOCKING
La MSI GTX 1080 Gaming X ya viene con OC de fábrica; sin embargo nos aventuramos a probar lo que sería hacerle un OC manual a la tarjeta y aquí están los resultados.
Monitoreo de OC con GPU-Z
Monitoreo de OC con HWinfo
Como podemos ver por los resultados, MSI ha limitado el OC que se le puede hacer a la GTX 1080, por motivos que desconocemos, llevándola a un promedio máximo de 2100 MHz de frecuencia de reloj de GPU, así como a 1400 MHz de memoria de GPU. Estas cifras fueron las últimas estables que pudimos probar antes de ponerles una frecuencia mayor que llevaba a alguno que otro crash.
Lo mencionado representa un 5 y 10% respectivamente de mejora frente a la frecuencia configurada de fábrica.
3DMark: A la izquierda resultados de GPU con OC, a la derecha GPU en estado base
Como vemos en este último gráfico, el rendimiento adicional obtenido por OC manual es de un promedio de 5% adicional al valor base, lo cual es poco, pero si tomamos en cuenta que esta tarjeta viene de stock con frecuencias más altas que las de su versión en Founders Edition, hacen que no se perciba nada mal después de todo.
CONCLUSIONES
Si bien el mayor exponente de MSI sigue siendo su línea Gaming Z, la GTX 1080 Gaming X no deja de ser una excelente tarjeta orientada al usuario que gusta de las configuraciones exigentes, rindiendo sin problemas muchos juegos AAA en configuración ultra en 4K, aún cuando no siempre llega a los ansiados 60 fps. Como ya ha pasado en otros casos, MSI añadió un conector adicional de 6 pines para alimentar sus ventiladores y darle energía extra a la tarjeta para el OC. Aún con los juegos más pesados en 4K y renderizando en streaming local a un Steam Link, la GTX 1080 Gaming X mantiene una temperatura máxima de 80°C lo que nos confirma que con funcionará de manera óptima aún en condiciones extremas, gracias a su excelente sistema de enfriamiento Twin Frozr VI.
Por otro lado su APP permite un OC sencillo, pero aparte que siempre es preferible hacerlo de forma manual, puede darte algunas complicaciones si lo usas con Overwatch. Con otros juegos no hemos tenido problema alguno y todo funciona de maravilla.
Estéticamente también se ve bastante bien, con detalles que saltan a la vista y combinan perfecto con el logo de la marca, además que el sistema de luces RGB totalmente personalizable es un gran plus. Lo único que podría quejarme sobre la construcción de la tarjeta es ese backplate complicado de desarmar.
Con respecto al Overclocking, vale decir que de manera manual es algo limitado dejando poco margen para hacer, aunque sigue siendo mejor que el configurado a través de su aplicativo. Desconocemos las razones que tiene MSI para hacerlo, pero al final el desempeño que se tiene no es nada despreciable sino todo lo contrario.
Sobre su precio, sabemos que no es el más bajo, aunque tampoco el más alto, pero quizá convenga esperar unos días más a ver si se reduce el precio con motivo del lanzamiento de la GTX 1080Ti.
MSI GTX 1080 Gaming X
Es una tarjeta para el jugador exigente y el entusiasta que se orienta por frecuencias altas. Ventiladores silenciosos, OC de fábrica y un desempeño fenomenal la avalan, aunque quizá convenga esperar unos días para ver cómo se ajusta su precio con la salida de la 1080Ti.
MÁSGAMERS hace entrega de los siguientes premios a la MSI GEFORCE GTX 1080 GAMING X