Microsoft ha hecho el último update de Windows 7, terminando una década de soporte al sistema operativo que les recuperó prestigio
Quizás no lo recuerden, pero Windows 7 se lanzó en un contexto bastante negativo para Microsoft. Productos como Windows Vista habían hecho un daño fuerte a la reputación de la empresa americana, por su baja velocidad y por otros problemas de los usuarios. Debido a esto, el objetivo del 7 fue recuperar el apoyo de los clientes después de su reciente fracaso. Lo sorprendente es que, hasta cierto punto, lograron sus objetivos. Si bien este sistema operativo no fue el más estable, los cambios en su presentación le dieron el perfil que muchos estaban buscando.
Sin embargo, esto sucedió en el 2009, y es hora de seguir hacía adelante. Desde ayer, Microsoft ha terminado su Extended Support de Windows 7. Si bien eso no significa que sus computadoras se vayan a incendiar por utilizar este OS, es importante resaltar que su seguridad será peor. Cualquier cosa que pueda amenazar su estabilidad se verá beneficiado, ya que usted no contará con la asistencia de Microsoft para eliminarlo.
A pesar de todo, Windows 7 representa el 26% del mercado de Windows. MS tendrá que moverse más para hacer que estos pasen a Windows 10.
Windows 7 vendió 630 millones de licencias y es indudable que este logró que Microsoft entre a la década actual con un perfil mucho más positivo. Y, como sucedió con el Vista, el lanzamiento de Windows 8 hizo que muchos vean su sistema actual (el 7) y piensen «creo que estoy bien con este». Esa es la muestra de que tu sistema ha funcionado, cuando tus usuarios no lo quieren soltar.